En Amsterdam...

... la gente sabe elegir su banco, porque saben cuidar lo que más aprecian (melodía de anuncio que inspire confianza aquí, gracias).
Y ya que estamos ¡sigamos con el marketing genital! Lo que te acabas encontrando por el barrio chino... Desde luego, el tema de mojar hoy en día está difícil... ¡Lotería, señores! ¡Lotería!

Ausencia

Desde luego, marzo ha sido un mes de desconexión. Magda se pilló una rabieta por no poder ir al Salón del Cómic de Granada, se quedó sin ver a Grandes del Cómic como Kenny Ruiz o Adam Kubert y así pues, sin pensarlo, cogió el petate y se largó a ver mundo, o al menos el que le permitían ver sus ojos llenos de lágrimas (insertar melodía tragico-llorosa a ser posible de violín que llega más a la patata):

Amsterdam

Una ciudad de cuento, y lo reiteran unos, los que se han paseado por sus calles, y otros, los que han morado sus coffee-shops (aunque éstos vivieron en su mayoría un cuento increíble y psicodélico).

Aquí me pregunto si hice la foto mal o los edificios están así de bien derechitos, porque si te fijas, la farola está más o menos erguida... Y las bicis...

...si cambiáis las bicis por pájaros, nos sale la peli de Hitchcock ¡¡!! Tooooodo eso, señoras y señores, son bicis, y más que habían aparcadas y en funcionamiento (tanteando la posibilidad de atropellar a turistas desprevenidos... ¡siempre!)



Próximamente: Paris

PD: ¿Y no hubiera sido más lógico ir a Granada? me dicen... y yo a eso respondo lo que un sabio me enseñó... ¡mira, un perro! (y pierde la vista calle abajo con ojos que buscan de forma vivaz al can invisible)



(sabio...¡vuelve!)